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My Story: Student #5
Recuerdo el día en el que decidí dejar mi país y a mis familiares para un nuevo futuro para US, 25 de Julio de 2022. Yo estaba terminando de empacar mi mochila para encaminarme a mi nuevo viaje. Mi abuela estaba muy triste ya que yo la tenía que dejarla para tener un mejor futuro, y se me hizo muy complicado dejar a alguien que me crió por tanto tiempo luchando para que yo no tuviera alguna necesidad. Ella con solo pensarlo empezaba a soltar lagrimas; triste ya que yo me iba. Ella me hizo de despedida una rica sopa de pollo de las que a mi me encantaban, y con lágrimas en los ojos me fui a dormir.
Al siguiente día, me levanté a tomar una ducha para ir bien despierto, ya que la noche anterior no logré dormir nada por la angustia que sentía al saber que me encaminaba a un nuevo viaje. De ahí, me despedí de mi abuela con lágrimas en los ojos, y tomé un bus hacia San Pedro Sula ya que ahí era que me iba a encontrar con mis amigos con los que iba a tomar este viaje. Ellos me estaban esperando ahí. Yo recuerdo que fue un
viaje largo. Me acuerdo que me senté al lado de una abuelita bien amable a la que pasé hablando durante todo el viaje hasta que ella me regaló un pan. Lo tenía guardado para comer en su viaje, y ella estaba preguntándome cuánto me estaría en San Pedro sin saber que en realidad yo nunca iba a volver.
Nosotros llegamos a San Pedro a las 12 pm. Cuando nos bajamos del bus yo con mis amigos fuimos hacia otro bus, en el cual nosotros íbamos a pasar de ser ayudantes para poder pasar desapercibidos. En el bus estuvimos toda la tarde viajando hasta la noche y nos quedamos en un lugar que no me acuerdo como se llamaba. Recuerdo que era un lugar que se sentía raro estar ahí ya que habían muchas personas con nosotros que yo ni conocía. Esa noche no logré dormir por la misma incomodidad de estar rodeado de muchas personas. En la madrugada salimos de ese lugar, íbamos en camino hacia la frontera para poder salir de Honduras y llegar a Guatemala. En ese día nos fuimos en un bus durante siete horas y terminamos llegando cerca de la frontera, en un lugar que era como un almacén. Había bastantes personas y un fuerte olor a polvo que con solo respirar daba ganas de estornudar. De ahí yo me dormí hasta el siguiente día.
El siguiente día fui de camino hacia Guatemala. Nos fuimos en camioneta por cinco horas mediante la cual me dormí por un buen tiempo. Recuerdo que fuimos hacia la frontera caminando aproximadamente tres horas. Llegamos a cruzar y me quedé en una especie de almacén. Tenía un olor a polvo horrible. También había muchas otras personas que no conocía, entonces yo ahí me quedé solo por una noche. El siguiente día en la mañana nos fuimos en un bus hacia la frontera la cual fue de ocho horas de viaje.
Ya cuando yo iba a cruzar la frontera, me fui por un camino el cual caminé por tres horas. Después de eso al cruzar la frontera. Me fui hacia una casa la cual nos quedamos por casi dos días. Entonces nosotros al siguiente día nos fuimos en la madrugada la cual nos fuimos en una camioneta de camino hacia méxico en un viaje de ocho horas.
Cuando por fin llegamos cruzamos la frontera de méxico por la carretera en una camioneta la cual yo iba atrás en el volco acomodado con otras personas. Cuando llegamos a Puebla nos quedamos en un pequeño cuarto el cual nos quedamos por tres o cuatro horas. Entonces después, llegó un van que nos recogió ya para camino a la frontera de México. Fue un viaje de nueve horas ya que teníamos que pasar por Puebla para por fin llegar a Reynosa.
Ya cuando llegamos. Nos quedamos en una casa por casi una semana. No era muy grande ni muy cómoda. No tenía ni camas, ya que nosotros teníamos que dormir en el suelo. Solo era con unas colchas que no estaban muy limpias. Entonces nos tocó limpiar la casa ya que era un desastre. Parecía que anteriormente se habían quedado otras personas ahí, las cuales no estaban muy limpias.
Ya cuando por fin terminó esta semana. Me llamaron para que por fin cruzara la frontera. Me levantaron en la madrugada. Lo único que podía llevar eran mis identificaciones y una que otra cosa importante. Dejando atrás mis cosas , emprendí mi gran viaje. Me movieron en una camioneta por tres horas. Cuando por fin llegamos había un inmenso río el cual era bastante silencioso. Me cruzaron por una balsa de las que se inflan. Se sentía como si pasaba por encima del río y de que con un movimiento en vano se podía dar vuelta la balsa. Cuando por fin llegue se sentía el aroma a los Estados Unidos.
I remember the day I decided to leave my country and my relatives for a new future for the US, July 25, 2022. I was finishing packing my backpack to head for my new trip. My grandmother was very sad because I had to leave her to have a better future, and it was very difficult for me to leave someone who raised me for so long; fighting so that I did not have any needs. Just thinking about it, she began to shed tears; sad since I was
leaving. She made me a delicious chicken soup that I used to love, and with tears in my eyes I went to sleep.
The next day, I got up to take a shower to be wide awake, since the night before I couldn't sleep at all because of the anguish I felt knowing that I was headed for a new trip. From there, I said goodbye to my grandmother with tears in my eyes, and took a bus to San Pedro Sula since that was where I was going to meet my friends with whom I was going to take this trip. They were waiting for me there. I remember that it was a long trip. I remember that I sat next to a very nice granny to whom I kept talking to throughout the trip until she gave me a piece of bread. She had it saved to eat on her trip, and she was wondering how long I would be in San Pedro without knowing that I was never actually coming back.
We arrived in San Pedro at 12 pm. When we got off the bus, my friends and I went to another bus, in which we were going to go from being helpers to being able to go unnoticed. On the bus we were traveling all afternoon until night and we stayed in a place, but I don't remember its name. I remember that it was a place that felt strange to be there since there were many people with us that I didn't even know. That night I couldn't sleep because of the same discomfort of being surrounded by many people. At dawn we left that place, we were on our way to the border to be able to leave Honduras and reach Guatemala. That day we took a bus for seven hours and ended up near the border, in a place that was like a warehouse. There were quite a few people and a strong smell of dust that just by breathing made you want to sneeze. From there I slept until the next day.
The next day I was on my way to Guatemala. We went by van for five hours and I fell asleep for a long time. I remember that we walked to the border for approximately three hours. We got to cross and I stayed in some kind of warehouse. It had a horrible dusty smell. There were also many other people I didn't know, so I stayed there for only one night. The next day in the morning we went on a bus to the border which was an eight hour trip.
When I was going to cross the border, I went down a road that I walked for three hours. After that we crossed the border. I went to a house where we stayed for almost two days. So the next day we left at dawn, we left in a van on the way to Mexico on an eight-hour trip.
When we finally arrived, we crossed the Mexican border on the highway in a van, which I was behind in the trunk, accommodated with other people. When we got to Puebla we stayed in a small room where we stayed for three or four hours. Then later, a van arrived that picked us up on the way to the Mexican border. It was a nine-hour trip since we had to go through Puebla to finally reach Reynosa.
We arrived. We stayed in a house for almost a week. It was not very big and not very comfortable. It didn't even have beds, since we had to sleep on the floor. It just had some bedspreads that were not very clean. So we had to clean the house since it was a mess. It seemed that other people had stayed there before.
When this week finally ended. They called me to finally cross the border. They woke me up at dawn. The only thing I could take with me were my IDs and one other important thing. Leaving my things behind, I set out on my great journey. They moved me in a van for three hours. When we finally arrived there was a huge river which was quite silent. They crossed me by a raft, one of those that inflates. It felt as if it were passing over the river and that with one futile movement the raft could be turned over. When I finally arrived, I took it all in.